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Tercer año? Al mismo resort? Esa fueron la pregunta que muchos me hicieron esta vez, y les digo que? Si! mi tercer año en el mismo resort, mismo lugar, mismas cosas que hacer, mismo todo; pero a pesar de eso la gente cambia (que se pueden volver amigos muy cercanos); el trabajo, las actividades que uno hace, con las personas que uno vive (pase de vivir en un depto. De todas mujeres de Perú, Argentina y Chile, a vivir solo con brasileñas y peruanas, y a vivir con varones y uno de cada país); Hasta uno mismo (yo creo, o por lo menos en lo personal) cambia; aprende muchas cosas nuevas, desde algo mínimo, hasta como son y cómo viven las personas y culturas de los otros países; aunque no sean todos iguales. Y cuando uno llega, más que llegar a tu casa, con tu familia y amigos de siempre, con los que conviviste desde chiquito, es empezar todo de nuevo, como el primer día que llegaste a tu lugar de trabajo/resort; y que te digan que cada vez que volves estas más rara, diferente, que cambiaste. Estabas tan acostumbrado a vivir de una manera, ser independiente, hacer lo que quieras, vivir con amigos, estar las 24hs. En movimiento y con gente, que es raro estar solo, te sentís incompleto, como que si te faltara algo. Que es lo que aprendí? Aprender: a hacer más independiente de lo que soy, a ser mas sociable, mas simpática, a convivir, que uno puede hacer su realidad, una diferente realidad (aunque sea por un tiempo) y mas allá que cuando volves te digan: “ahora estas acá, esta es TU realidad”. Mi realidad? No se la de ustedes, pero mi realidad, aunque no sea para toda la vida, solo por un periodo corto de tiempo, fueron meses de vivir a lo máximo, y no me arrepiento en lo mas minino. Y que es lo que me llevo? Experiencias, memorias inolvidables, cosas que pude tachar de mi lista y agregar más; pero más que nada gente increíble y desconocida, que ahora, después de estos meses, puedo llamar amigos, grades amigos podría decir, que hicieron estos 3 meses y medio, algo que no hubiera pasado sin ellos.